Diferencias alfombra manual y mecánica
¿ Cómo saber si una alfombra es manual o mecánica ?
Esta es, seguramente, una de las dudas más frecuentes que se plantea a la hora de comprar, valorar o simplemente curiosear en este mundo de las alfombras.
Y sin embargo es, posiblemente, una de las cuestiones de más fácil respuesta y que, con las “pistas” adecuadas, podemos llegar a entender y distinguirlas con suma facilidad.
Todo ello, el saber distinguir entre una alfombra manual y otra mecánica y conocer sus diferencias, hará que valoremos mucho más y en su justa medida, el trabajo que representa anudar una bella obra de arte como es una alfombra manual y comprendamos que el precio que se paga por ellas, aunque a veces mucho dinero, es siempre muy barato.
Aparentemente son similares y desempeñan la misma función pero las diferencias son, simplemente, abismales. Es exactamente la misma diferencia que existe entre un cuadro pintado a mano y un póster o lámina impresa con una imagen sobre ella.
Las alfombras manuales provienen de una tradición que se remonta a más de 2500 años con un complejo proceso de elaboración. Es una disciplina que ha evolucionado durante más de 25 siglos adquiriendo toda una serie de características que la convierten en todo un arte.
Por el contrario, la alfombra mecánica, es una, mejor o peor, imitación pero siempre una imitación del diseño de una alfombra tradicional realizada a mano. Es un proceso mecánico realizado por una máquina que es capaz de producir miles de alfombras exactamente iguales con una calidad y resultado inferiores al de una manual.
A continuación detallamos las principales “pistas” para diferenciar una alfombra manual de una mecánica:
1.- Flecos: En las alfombras manuales el fleco es parte de la urdimbre, los hilos verticales de la alfombra, por lo tanto es un hilo que nace en un extremo de la alfombra, cruza toda ella y sale por el otro extremo. En una alfombra mecánica el fleco es un añadido artificial que se cose en el extremo de la alfombra a fin de imitar el efecto de fleco real de una alfombra manual y, por lo tanto en este caso los flecos no salen del interior de la alfombra, están simplemente superpuestos.
2.- Nudo: la alfombra manual está anudada lo cual significa que si le damos la vuelta podremos ver la «bolita» del nudo, el reverso de una alfombra manual está llena de nudos. En una alfombra mecánica no existen nudos y en muchas ocasiones su parte posterior está recubierta por un forro de tela para disimular esta circunstancia, otra consecuencia de todo ello es que, generalmente, si tiramos de los «pelitos» de una alfombra manual éstos no salgan, como mucho lograremos arrancar algún hilo, sin embargo, en una alfombra mecánica al no tener nudo si tiramos de uno de esos hilos lograremos sacarlo limpiamente en forma de V.
3.- Inclinación del pelo: En una alfombra manual el pelo de la alfombra está siempre inclinado hacia un lado, lo cual tiene dos principales consecuencias: La primera es que ello produce un efecto tornasol y por lo tanto la alfombra se ve clara desde un lado y oscura desde otro y en segundo lugar al estar el pelo inclinado forma una estructura similar al de las tejas de un tejado y por lo tanto impide que la suciedad penetre en su interior, quedando acumulada en la superficie. Sin embargo en una alfombra mecánica el pelo siempre está recto, lo cual implica que con el paso del tiempo se empieza a chafar, así mismo no hay efecto tornasol, se ve igual desde todos los ángulos. Y finalmente la suciedad sí entra en su interior.
Hilo en forma de V en una alfombra mecánica
4.- Tintes: Una alfombra manual puede estar tintada con tintes naturales o artificiales mientras que en una alfombra mecánica únicamente se utilizan tintes artificiales.
5.- Composición: Una alfombra manual puede estar anudada en lana o seda e incluso a veces en algodón pero nunca en tejido artificiales, mientras que las alfombras mecánicas suelen estar fabricadas con tejidos artificiales y en algunas ocasiones con lana, nunca seda.
6.- Calidad y resultado: Consecuencia de todo lo expuesto anteriormente es que una alfombra manual ofrece un resultado mucho mejor que una mecánica, mayor durabilidad y, sobretodo mucho mejor desarrollo con el paso del tiempo, lo cual significa que envejece mucho mejor, una alfombra manual generalmente se vuelve antigua, adquiriendo cada vez mayor belleza, mientras que una mecánica se vuelve vieja dirigiéndose, irremediablemente, hacia su único fin posible: el contenedor de la basura.
7.- Doblado: Como consecuencia de la forma en que está estructurada, una alfombra manual se puede doblar al igual que doblamos una sábana o una manta, mientras que una alfombra mecánica únicamente puede ser enrollada, de lo contrario su estructura se rompería.
En el siguiente video podemos observar el proceso completo de fabricación de una alfombra manual, desde su diseño hasta el final: